Yo creo que el Gobierno debería articular y poner en marcha ya un Ingreso Mínimo Vital para los políticos. Es algo urgente y prioritario. Lo necesitan como agua de mayo nuestros pobres próceres de la patria que cada día se los ve peor, casi como inmigrantes subsaharianos mal alimentados o padres de familia españoles en las colas de Cáritas y los comedores sociales por todo el país. Yo los veo en el Congreso y me parecen eso (no sé si se han dado cuenta ustedes pero me ha salido un pareado sin haberlo preparado).
Si no fuera porque hace tiempo que estoy un poco harto de change.org y otras organizaciones parecidas yo mismo subiría una petición a internet para que la firmen y se sumen todos aquellos españoles e incluso extranjeros a los que la idea les parezca bien. Y me explico, la idea consistiría en lo siguiente. En lugar de pagarles entre cinco y diez mil euros al mes, dietas y taxis gratis, etc., que es lo que cobran nuestros políticos, eso se lo retiramos y les damos, ya que a fin de cuentas todo sale de nuestros bolsillos, de los bolsillos de los ciudadanos, una "paguita" de trescientos euros al mes y... que se vayan arreglando. Con trescientos euros al mes se hacen maravillas. Hasta aprendes a hacer guisos riquísimos en casa solo con garbanzos y nada más Yo los estoy haciendo. Y de ahí a Master Chef solo hay un paso. Que se lo pregunten a Jordi Cruz.
Puede parecer que estoy de broma, pero no lo estoy. En absoluto. Estoy hablando muy en serio. Quizá si nuestros políticos cobraran solo trescientos euros al mes durante una temporada (unos años, claro) aprenderían algo útil y probablemente se volvieran a la empresa privada si es que alguna vez estuvieron en ella, ya que como suelen decir tan a menudo muchos engoladamente "yo en la empresa privada ganaría más". Pues nada, adelante "hombre del seiscientos" ¿o deberíamos decir entonces hombre de los trescientos?
Lo indiscutible es que la mayoría de nuestros políticos son unos... (no pondré la palabra aquí porque a este periódico no le gustaría, pero los lectores ya saben cual es la palabra, pónganla ustedes mismos).
¿Lo que vemos es de verdad o es una distopía literaria tipo "El cuento de la criada" de Margaret Atwood? Cuando ponemos la tele por las mañanas y vemos a todos esos tipos encorbatados discutiendo estupideces en el Congreso, bien sea en Noticias 24 Horas, en La Sexta, en la 2 o en cualquier radio o cadena de televisión ¿es real?, ¿en serio? Yo creo que no. A mí las sesiones del Congreso me parecen lo mismo que el CSI Las Vegas. Y la verdad ¿qué quieren que les diga? Prefiero a Grissom. Sus escarabajitos y moscas que se dedican a devorar cadáveres me resultan mucho más creíbles y reales que esos señores y señoras vestidos de gris o de azul.
