Zapatero a tus zapatos

La frase “zapatero a tus zapatos”, encaja a la perfección con la reciente intervención que ha protagonizado el ex presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero en su “visita” al fugado de la justicia española, Carles Puigdemont, el ínclito portavoz de Junts.

Zapatero tiene, al final, que dedicarse a sus zapatos si por lo menos tiene intención de hacer algo útil y productivo

El origen de dicha frase es un refrán que significa que “cada persona debe ocuparse de sus asuntos, su profesión o sus tareas, y no inmiscuirse en temas que no le competen o de los que no entiende”. Se utiliza para “criticar a quienes dan opiniones sobre asuntos ajenos o no relacionados con su ámbito de conocimiento”. Por eso nunca mejor dicho el uso de Rodríguez Zapatero se dedique exclusivamente a las tareas “institucionales”.

Desde que el extitular del Gobierno abandonó dicho cargo, ha asumido una variopinta estela de apariciones que han llamado poderosamente la atención, aunque principalmente sus incursiones con el ínclito presidente de Venezuela, desde el año 2014 en que inicia “labores de mediación” con dicho país de la costa norte de Sudamérica. El caso es que desde que el PSOE tiene otro Presidente del gobierno, paralelamente, el “ex” Zapatero está ejerciendo como “presidente” paralelo que apoya al cien por cien todas las actuaciones que realiza Sánchez.

La cuestión es que Rodríguez Zapatero actuó como mediador en dicho nuevo intento tendente a reconducir las negociaciones con el independentismo catalán, y reemplazando que el hasta ahora “representante” del Gobierno se ha visto obligado a cambiar la oficina por una moderna cárcel. Nos estamos refiriendo al ex numero tres del PSOE, Santos Cerdán. Por cierto, el caso es que Puigdemont fue claro: dijo no al apoyo de los presupuestos que en realidad era el motivo de la presencia del ex presidente del Gobierno.

Por cierto, dicha reunión en una modificación de escenario, pues cambiaron Suiza por Bélgica. Mas que nada que el nuevo lugar solo ha servido para garantizar la postura inamovible de Puigdemont, con Zapatero como espectador impertérrito. Antes estas cumbres “estelares” contaban como la presencia de otro mediador internacional, el diplomático salvadoreño Francisco Galindo, el llamado ‘verificador’ designado para mediar en el cumplimiento de los ‘acuerdos’ entre el PSOE y Junts, quien por cierto, no figura como diplomático acreditado en su país, la República de El Salvador. Por cierto, por donde anda ahora este salvador.

Los de JUNTS continúan destacando la anormalidad democrática, lo que implica que el “expresident” aún no se le aplicase la amnistía y todavía no hay ninguna fecha, lo que genera entre los independentistas que la “ansiedad” mientras nadie sabe nada. Así las cosas, Zapatero tiene, al final, que dedicarse a sus zapatos si por lo menos tiene intención se hacer algo útil y productivo.