Los vecinos de la plaza San Antonio también tendrán que dejar sus garajes

Tras la clausura del párking de la plaza San Antonio, que este lunes vivió su último día de actividad, ahora empieza la cuenta atrás para que los propietarios de las plazas privadas también se vean abocados a abandonar el subsuelo, al menos hasta que el Concello de Ourense le ponga remedio.

El lunes el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de Ourense dictó un auto en el que desestima la petición de la comunidad de propietarios de la Plaza San Antonio (y, por extensión, del Concello, que apoyaba esa postura) de declarar la imposibilidad material o legal de ejecutar la sentencia anterior (del 30 de diciembre de 2021, confirmada por el TSXG el 23 de febrero de 2023).

Esta sentencia original declaraba la nulidad de las licencias urbanísticas (de obra, ocupación, usos, actividad y apertura) concedidas en 2007 para el subsuelo de la Plaza San Antonio, debido a que este espacio tiene carácter de dominio público y no podía ser privatizado sin una concesión administrativa.

El auto conocido este lunes recalca que la ejecución de la sentencia no implica una demolición de las construcciones, sino la recuperación de la posesión del subsuelo por parte del Concello de Ourense, cesando cualquier uso privativo (como el aparcamiento o los trasteros) que no esté amparado por una concesión administrativa. Es decir, el subsuelo debe quedar libre de ocupaciones privadas ilegales. “No es posible que los coches sigan accediendo a los sótanos de los edificios sin la previa y justificada obtención de la correspondiente autorización, y desde luego no es posible que sigan estacionando bajo la plaza. Al menos, no hasta que se tramite y conceda, en su caso, la correspondiente concesión”, explica el abogado Antonio Feijóo Miranda, abogado de la parte denunciante.

En resumen, el juzgado reafirma que la sentencia debe cumplirse en sus propios términos y que no existe imposibilidad para ello, ordenando que la ejecución continúe. Además, en todo caso la jueza abre a que los vecinos puedan recuperar en futuro sus plazas, y el Concello se ahorre indemnizaciones. Para ello, una vez recuperada la posesión del subsuelo por parte del consistorio, la magistrada sostiene que se podría “regular” la utilización privativa mediante una concesión.

“No es posible que los coches sigan accediendo a los sótanos de los edificios sin la previa y justificada obtención de la correspondiente autorización, y desde luego no es posible que sigan estacionando bajo la plaza. Al menos, no hasta que se tramite y conceda, en su caso, la correspondiente concesión”, explica Antonio Feijóo Miranda, abogado de la parte denunciante.