LOS TITULARES DE HOY
La portada de La Región de este sábado, 20 de diciembre
44 ALDEAS
Mientras el debate español sobre la inmigración y la convivencia se polariza en escenarios como el de Torrepacheco (Murcia), Ourense emerge como un ejemplo tangible de cómo la población extranjera no solo se asienta en el rural, sino que se convierte en un motor vital para su recuperación sin que de momento haya generado choques culturales, sino una reversión del declive demográfico que ha resucitado buena parte de los envejecidos y despoblados núcleos rurales.
Un análisis detallado de los datos del nomenclátor del Instituto Nacional de Estadística revela que 79 núcleos rurales distintos de la provincia cuentan ya con al menos un tercio de sus habitantes de origen foráneo. De ellas, 44 aldeas tienen incluso mayoría de población extranjera frente a la población nacional. Son una clara minoría dentro de los 2.611 núcleos de población habitados en la provincia, pero con una tendencia creciente, especialmente con la llegada de latinoamericanos (la mayoría).
Este fenómeno se extiende por 35 de los 92 concellos. De los casi ochenta núcleos identificados, 44 registran una mayoría absoluta de población extranjera (superando el 50%), llegando al 100% en algunos casos.
Cabe destacar que Ourense, con 217 kilómetros de frontera compartida con Portugal, es la provincia española con mayor línea divisoria con otro país. Esta singularidad geográfica introduce un matiz importante en la composición de la población extranjera. Algunos de estos núcleos con alta presencia foránea, especialmente aquellos situados en concellos de la Raia, ven sus estadísticas distorsionadas por un factor transfronterizo. Residentes portugueses que desarrollan su vida y actividad a ambos lados de la “raia”, o que establecen su residencia en estas aldeas, contribuyen a esta demografía, reflejando una integración y un flujo de población muy particular, diferente al de otras zonas del interior.
Entre los núcleos con una presencia extranjera del 100%, encontramos casos como Santabaia (Amoeiro), San Mamede (A Bola), Ogos (Lobios), Xeás (Montederramo), Pedrosa (Pontedeva), A Cancela (Rairiz de Veiga), Senreiro (San Xoán de Río), O Gorgullón (Montederramo) o Baldomar (Nogueira de Ramuín). Muchos de estos son pequeños enclaves que, con apenas un puñado de habitantes, han encontrado en la población foránea su única o principal presencia.
Más allá de la mayoría absoluta, la presencia extranjera se extiende a núcleos con porcentajes que oscilan entre el 50% y el 75%. Aquí figuran A Ponte (Piñor) con 71,4%, A Torre (Piñor) con 64,7%, A Pía (Verea) con 61,5% o Balteiro (Gomesende) con 57,1%.
Al extender el análisis a los núcleos con al menos un tercio de población extranjera (33% o más), se suman localizaciones de un tamaño más considerable, la mayoría fronterizas. Es el caso de Feces de Abaixo (Verín), que con 301 habitantes presenta un 33,5% de población extranjera, la mayoría portugueses, y también Rabal (Oímbra), 35,9%, o Bubaces (Lobios), 34,9%.
Actualmente, en el conjunto de la provincia, 48.967 de sus 305.618 habitantes (16%), según los datos de abril de 2025 del INE, son nacidos en el extranjero, aunque la mitad de ellos tiene nacionalidad española. Son 24.856 solo con nacionalidad extranjera (8,1%).
Contenido patrocinado
También te puede interesar
LOS TITULARES DE HOY
La portada de La Región de este sábado, 20 de diciembre
PODCAST Y VÍDEO
EL PRIMER CAFÉ | Viernes, 19 de diciembre
Lo último
ECONOMÍA Y VIVIENDAS ESPAÑOLAS
El Banco de España mejorará su previsión para 2025 y 2026
ORÁCULO DAS BURGAS
Horóscopo del día: sábado, 20 de diciembre
FESTAS DO NADAL
Rueda quere un “resultado histórico” do PPdeG en 2027