Baiona celebró la Arribada entre artesanía y exhibiciones

Baiona celebró ayer el día grande la Fiesta de la Arribada, una celebración en la que la villa regresa al año 1493 durante tres jornadas. Hasta la localidad se acercaron personas llegadas de distintos puntos de Galicia, España y el norte de Portugal para conmemorar el 532 aniversario de la llegada de la carabela “La Pinta” a la Playa de A Ribeira. Este fue un evento, que se recreará hoy a las 18:30 horas en el mismo arenal, que cambió el transcurso de la historia al traer consigo la noticia del descubrimiento de un nuevo continente.

Los cañones de la fortaleza dieron el pistoletazo de salida a la jornada de ayer con el anuncio de la apertura del Real Mercado a las 10:00 horas. Desde primera hora de la mañana, Baiona empezó a recibir a los visitantes que, en gran medida, llegaban vestidos con ropa de época para disfrutar de esta celebración desde otra perspectiva.

Este fue el caso de Santiago y Cristina, de Baiona, que a pesar de ser unos habituales de esta celebración este año decidieron estrenarse con ropajes del siglo XV. “Llevábamos varios años queriendo venir con los trajes. Es la primera vez que lo hacemos aquí y la fiesta se vive de una forma diferente”, explicaba Santiago. “Si vienes de época lo sientes de otro modo a que si vienes de visitante con ropa de calle. Te sientes integrado en el ambiente”, añadía Cristina.

A partir del mediodía la Real Villa de Baiona empezó a llenarse de música y ritmo de la mano de los pasacalles, que animaban el ambiente y alegraban a gran parte de los asistentes gracias a zancudos danzantes y a la música de estilo medieval. Además, empezaron en distintos lugares de la localidad varias de las exhibiciones, los eventos más característicos de una celebración. De esta forma, las gradas del arenal de A Ribeira se llenaron para ver la demostración de tiro con arco o el espectáculo de cetrería, mientras que una multitud disfrutaba de recreación de un combate de esgrima medieval en el Parque da Palma.

Al mismo tiempo que las exhibiciones, llegaban las autoridades a la Plaza do Concello. Acto seguido, junto a la Banda de Música de Baiona, se dirigieron al Paseo Pinzón para celebrar el acto conmemorativo de la Arribada.

Junto al alcalde de la localidad, Jesús Vázquez Almuíña, llegaron: el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda; la conselleira de Vivenda, María Martínez Allegue; el conselleiro de Cultura, José López Campos; el presidente de la Diputación de Pontevedra, Luís López; Juan Cobo, alcalde de Santa Fe; Milagros del Rocío Romero, regidora de Palos de la Frontera; la alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo; el alcalde de Gondomar, Paco Ferreira y, finalmente, el regidor de Nigrán, Juan González.

Durante su intervención, Almuíña hizo hincapié en la importancia que tuvo la Arribada en la historia de España y, especialmente, en la de la villa. Además, puso el foco en como este suceso fue el inicio de los hermanamientos de Baiona con localidades como Palos de la Frontera, Santa Fe de la Vega, Pornic, Rafel Freyre (en Holguín, Cuba) o con Vila do Bispo. Finalmente, recordó a Mauri Vilar, Santi Leyenda y Estela Blach, vecinos de Baiona que perdieron su vida en 2024.

Por su parte, Alfonso Rueda destacó el “privilegio de todos los gallegos” por ser parte del recorrido histórico de las carabelas en su vuelta al continente, y agradeció la ilusión de la organización y de los vecinos por sumarse a la conmemoración “de un trozo clave de nuestra Historia”. “Esta es una ocasión para reivindicar la labor de los que fueron y los que les fueron sucediendo durante siglos y que marcaron la diferencia donde estuvieron”, remarcó el presidente autonómico.

A la hora de comer Baiona se llenó con más visitantes, que llegaron atraídos a la villa por la oferta gastronómica de la fiesta y las actividades de la tarde. Juegos tradicionales, oferta en fresones llegados desde Palos de Frontera, talleres de escritura medieval, exhibiciones de oficios artesanales, conciertos de pasacalles y representaciones teatrales hicieron las delicias de los asistentes de esta celebración, declarada de Interés Turístico Internacional.