El COB, ante el Burgos: el más difícil todavía

Para jugar el play off de ascenso a la Liga ACB hay que ganar muchos partidos. Para lograr el ascenso directo, perder muy pocos. Los dos intereses se cruzan esta tarde en el Pazo con un COB que se ha quedado sin colchón para defender su puesto entre los mejores y un San Pablo Burgos que es líder en solitario, pero todavía con el Estudiantes al acecho.

No puede haber partido más complicado para un COB que ha conseguido dar un claro paso adelante en su juego, pero anclado por una racha interminable de derrotas que ahora se alarga por culpa de los finales igualados.

En la balanza para confiar, los ourensanos solo tienen que pensar en las citas ante Estudiantes u Obradoiro. También en el partido de la semana pasada contra el Betis. El COB siempre ha competido bien, sin importar la altura del listón. En el otro lado, en el plato de las dudas, le tocará autoconvencerse de que son capaces de soplar para que salga cara haciendo lo mismo. Aunque el rival obliga a más. Ganar al San Pablo Burgos sería un empujón impagable. Para la clasificación, para la confianza y para el Pazo. Derrotar al líder, el día en el que regresa Moncho López al banquillo, metería en el carro de los creyentes al más escéptico.

Con algunas piezas clave entre algodones toda la semana, la exigencia es todavía mayor. El COB ha recuperado su nivel defensivo ante los “grandes”, pero tiene que limitar las pérdidas de balón y tener un porcentaje de acierto exterior que compita con el de un rival con tantos puntos en las manos.

Defensa y criterio

Todas las opciones que pueda tener el COB pasan por su defensa. Aunque esté obligado a acercarse a los 90 puntos para tutear a un Burgos con facilidad para dispararse en la anotación, la clave estará en limitarlos todo lo que puedan. No dejar correr a un Burgos que lo hace bien y con muchos jugadores, parar rápido los arreones que suelen tener y exigir a una batería de tiradores con calidad para hacer daño incluso bien defendidos, pero mortales si lanzan cómodos.

Físicamente, el COB tiene jugadores para competir bien en la mayoría de emparejamientos, dejando al margen la potencia de Gonzalo Corbalán jugando a campo abierto o si pueda atacar el aro en uno contra uno. Sergio Rodríguez recuperó su mejor versión en Sevilla, Unai Mendikote vuelve a ser consistente en las dos mitades del campo y Romaro Gill está mejorando de los problemas físicos que lo han limitado en varias jornadas. Tiene Moncho López jugadores oponer resistencia desde la pizarra.

La enfermería

La presencia del estadounidense Aanen Moody está descartada por los problemas físicos que arrastró toda la semana. Todo en una tarde para pensar más en el trabajo oscuro el COB que en el brillo ofensivo. Una semana más el cuerpo técnico ha tenido que trabajar muchas sesiones con varios jugadores ausentes. Rafa Lisboa se quedó fuera ante el Obradoiro, Romaro Gill ha “apretado” los dientes en varias jornadas y Marvin Ogunsipe y Ben Krikke también han sido duda en algunas previas. Gajes del oficio de cara a otro partido para presumir de liga en el Pazo.