Dos semanas después de que se empezasen a flexibilizar las condiciones para la movilidad al permitir las salidas de los niños de hasta 13 años y, siete días más tarde, permitir paseos de adulto y hacer deporte individual, Ourense y Pontevedra son las únicas ciudades de Galicia que no han implementado medidas en esta crisis para facilitar los desplazamientos en detrimento de las zonas destinadas al tráfico rodado, que con motivo del estado de alarma ha caído notablemente, aunque con la notable diferencia de que la ciudad pontevedresa lleva años siendo considerada como un referente mundial en la movilidad a pie, con la urbe con calles y plazas lo suficientemente anchas para mantener la distancia social, algo que en muchos puntos de Ourense se convierte en misión imposible.
"No es necesario peatonalizar más calles porque hemos salido en hora punta y vemos que estamos muy bien dotados", decía el jueves el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, que en materia de movilidad únicamente ha ordenado medidas como la prohibición de que los mayores de 14 años vayan en bicicleta por las sendas fluviales y fijar que el paseo del Barbaña sea de sentido único. Sin embargo, paradójicamente Jácome va ahora en dirección contraria a sus homólogos gallegos, que han activado peatonalizaciones provisionales, cortes de carriles para destinarlos a los peatones o, incluso, recomendar a los ciudadanos que caminen por la acera del sentido de circulación para evitar cruces.
Vigo
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, fue claro esta semana. "Necesitamos calles peatonalizadas para que los ciudadanos las utilicen", dijo el regidor tras anunciar que a la medida de restringir el tráfico los domingos y festvos en más de 70 calles de la ciudad sumó ayer la iniciativa de que los días laborables entre las 17,00 y las 23,00 horas sean peatonales más de una veintena de vías, distribuidas por todos los barrios del municipio, para dar facilidades a todos los vecinos.
A Coruña
También ayer se puso en marcha en A Coruña la denominada "Zona 10", lo que supone que de lunes a viernes entre las 20,00 y las 23,00 horas, cuando sale a pasear la mayoría de la población, y los fines de semana también en la franja matinal, los peatones tengan prioridad en todas las vías de un único carril, debiendo circular los vehículos a un máximo de 10 kilómetros por hora. Por otro lado, tramos del paseo marítimo son peatonalizados y algunas arterias de la ciudad con varios carriles cederán uno de ellos a peatones y ciclistas, estando correctamente señalizado mediante vallas.
Lugo
En Lugo también mueven ficha en materia de movilidad. Tras recomendar en los primeros días con paseos permitidos circular a pie en el sentido de la circulación rodada, el gobierno municipal anunció el pasado jueves que desde ayer se cerraba al tráfico un carril de la ronda de la Muralla. "Pretendemos facilitar que as persoas poidan manter a distancia de seguridade habilitando un novo paseo peonil de 2,5 kilómetros no centro de Lugo", señalaba el teniente de alcalde del municipio, Rubén Arroxo. El gobierno liderado por la socialista Lara Méndez también ha reunido a la Comisión Municipal de Tráfico para abordar el plan de desescalada a nivel municipal.
Santiago
La capital de Galicia también aprobó en junta de gobierno diferentes medidas para facilitar la convivencia en la ciudad, en su caso limitadas al fin de semana, desde el mediodía del sábado a la noche del domingo. Así, se cerrarán al tráfico tres de las calles más transitadas del ensanche compostelano y, si la experiencia es positiva, el poyecto se extenderá a más vías del centro. En el bando que emitirán para regular todo, incluirán también recomendaciones como caminar en el sentido de la circulación.
Ferrol
Con el objetivo de "poñer a disposición dos veciños o maior espazo posible", el gobierno local de Ferrol también ha dado los pasos para habilitar un paseo peatonal de ocho kilómetros desde la avenida do Mar hasta A Malata, que estará operativo durante los fines de semana que dure el estado de alarma. En paralelo, el Concello ferrolano ha cerrado otras calles al tráfico en función de la demanda, con la previsión de ampliar la medida a más espacios de la ciudad.
En las villas sí que hay reorganización de las calles para ayudar a los vecinos
Las calles de Celanova amanecen estos días con nueva cartelería y marcas en el pavimento que buscan concienciar a la población de la necesidad de caminar por la acera de la derecha en el sentido de la marcha, con el objetivo de reducir el contacto físico entre los viandantes, a quienes se les insta a mantener las distancias individuales y el uso de mascarillas.
La medida se suma a los cambios de dirección y al cierre de calles y plazas efectuado esta semana en el casco urbano celanovés, si bien se permite el reparto hasta las 11,00 horas y, el resto del día, el acceso a proveedores y clientes que así lo requieran para la distribución y recogida puntual de mercancías pesadas debidamente justificadas.
Esta reorganización viaria provisional se toma por la necesidad de promover espacios públicos para el paseo de los vecinos y también para facilitar la instalación de terrazas a la hostelería. Una medida que, en la práctica, contribuirá a la dinamización económica del resto de establecimientos. Con todo, el grupo de gobierno presidido por Antonio Puga está estudiando las posibilidades legales para hacer una reducción de la tasa de ocupación de la vía publica.
Carballiño o Valdeorras
La recomendación de circular por la derecha también se anunció hace días en Trives, y en O Barco de Valdeorras, el alcalde Alfredo García ha adelantado que la semana próxima publicará un bando con dicha recomendación, con el objetivo de "evitar corrillos y que la gente se pare", matizaba.
En O Carballiño, Francisco Fumega también ha hecho referencia a esa recomendación, además de advertir severamente de la necesidad de respetar las distancias del paseo (a un kilómetro de los domicilios) "porque no todo el mundo puede ir a pasear al parque municipal o a Corzos", dijo.
