Refugio para los sin techos

Quiero saber si sabéis que en Ourense, con más de 100.000 habitantes y tanta gente con problemas económicos, ¡solo hay un refugio para los sin techo! Y lo peor es que la gente puede estar ahí solo tres días y después tienen que esperar tres meses para volver. ¡Es inhumano!

Pienso que debería ser un tema de vuestro periódico porque mucha gente, como yo, no saben esto y es inhumano. Yo lo vi hoy por primera vez; he visto cómo se trata a esta gente sin techo. Con asco, no les escuchan, ni les miran a los ojos; les meten en lista de espera... ¿espera de qué? No les dan solución. Están deprimidos y ni pueden hablar correctamente a un psiquiatra en urgencias del hospital. Tienen ganas de morir, piensan en hacerlo y ni les ingresan... ¡de vuelta a la calle! Esto es no atención a personas en peligro, personas vulnerables.

Hace cinco años que vivo en Ourense y hay cada vez más gente en la calle, sin recursos, y siempre me preguntaba por qué. ¿Por qué duermen ahí? Hoy lo vi y lo entendí. Escuche una asistenta social decirme: “De esta gente tenemos demasiado en Ourense”, ¡delante de esta persona!

Seguro que el alcalde podría preparar otro refugio o más. Y hacer como otros países, como en el mío, Suiza: pedir algo por la entrada para el mantenimiento. Allí, cuando entra la gente, debe pagar 5 francos, y le dan un almohada y una manta. Por seguridad, no pueden entrar con drogas o alcohol o cosas como un arma. Les ofrecen una sopa, una cama y deben ducharse obligatoriamente. A la mañana, un café con pan antes de marcharse y la gente debe meter su manta y su almohada en una lavadora.

Que sean depresivos, drogadictos, alcohólicos... te tratan con humanidad. Esta gente eligen un mal camino... pero ¿conocemos sus historias? ¿Por qué empezaron con la droga o el alcohol?, ¿por qué duermen fuera? No lo sabemos... pero primero ¡son humanos!

El alcalde debería preocuparse de este problema antes de muchas cosas, como fiestas, luces...