David Rubín: al final, no hacía falta nacer en Nueva York

Bajo los soportales de la Plaza Mayor de Ourense, un engendro caníbal se parte el lomo contra el rey de los gautas, Hércules tumba a Superman de un puñetazo y la hija del mayor héroe de la ciudad se entrevista con un espeluznante cíclope de metal. Choques de colosos que, no obstante, no se escuchan desde la calle: viven en las más de 200 páginas de cómic originales que conforman la exposición definitiva sobre David Rubín.

"Sacrificio e ascensión" está comisariada por Asier Mensuro, y podrá visitarse hasta el 17 de enero, en el espacio de exposiciones que Abanca-Afundación tiene en el centro de la ciudad. "Faime especial ilusión que a cidade que me viu nacer, e que sempre levo por bandeira alí onde vou, acolla a maior exposición sobre a miña obra que se fixo ata a data", explica el autor de cómics ourensano más internacional.

Detalle del cartel de la exposición monográfica de David Rubín.

La muestra se lee como un viaje de ida y vuelta a los EEUU, y más allá. Conviven los lápices de La tetería del oso malayo -una de sus primeras obras, recientemente traducida al gallego- con las colaboraciones junto a pesos pesados de la industria estadounidense como John Arcudi o Paul Pope. Viendo la evolución, Rubín se acuerda de su infancia: "Parecía que se querías facer cómic non podías ser de Ourense, tiñas que ser de Madrid, ou Nova York", apunta, divertido por la ironía.

"Parecía que se querías facer cómic non podías ser de Ourense, tiñas que ser de Madrid, ou Nova York"

El autor desea que ver el fruto de 15 años de trabajo pueda inspirar a los jóvenes ourensanos con inquietudes creativas. “Emocióname especialmente poder dicir que son tamén profeta na miña terra”, asegura. Resuena el eco de sus palabras recorriendo la exposición. Las paredes vibran con las composiciones a la vez barrocas y elegantes del ourensano, sean bocetos a lápiz, páginas acabadas o el mural dibujado para la ocasión que decora una de las esquinas.

En el piso subterráneo -“Sacrificio y ascensión” tiene dos plantas-, al final de la sala, un vistazo al futuro: la portada de El fuego, la próxima novela gráfica que Rubín escribirá y dibujará para el mercado español, de la mano de Astiberri. Junto a su participación en la adaptación del Norse Gods de Neil Gaiman y una épica mitológica que une ciencia ficción y novela negra -Cosmic Detective, con Jeff Lemire y Matt Kindt-, parece que no le va a faltar trabajo al ourensano una vez acabe la exposición.

Nuevas tecnologías y sinergias, claves de una exposición 2.0

El vigués Asier Mensuro es el comisario de la muestra, y celebra que la exposicióna vaya "más allá de lo convencional". Entre los extras que trae consigo el evento está la integración con tecnología de realidad aumentada -que permite, por ejemplo, apuntar con el móvil a una de las obras y ver el 'making of'- o la sinergía con el comercio local: la tienda de cómics cercana ofrece un descuento en las obras de David Rubín mientras dure la muestra.

Mensuro anuncia también una visita guiada en vídeo que se está rodando estos días y que se colgará en redes sociales para que los seguidores del autor de fuera de Ourense puedan disfrutar también de la retrospectiva. Para él, todo ello apuntala una realidad: que el cómic es "uno de los grandes artes del siglo XXI".