La justicia respalda la solicitud de eutanasia de una joven con trastorno límite de la personalidad en Barcelona

En un fallo emitido en Barcelona, una jueza ha respaldado la solicitud de eutanasia de una joven de 24 años, a pesar de la oposición de su padre, quien había presentado un recurso en contra de la resolución tomada por la Comisión de Garantía y Evaluación de Catalunya. El padre, apoyado por la Fundación de Abogados Cristianos, argumentó que su hija no tenía la capacidad suficiente para tomar esta decisión debido a sus problemas de salud mental, en concreto, un trastorno límite de la personalidad.

Sin embargo, la magistrada del Juzgado Contencioso 12 de Barcelona desestimó el recurso y resolvió de acuerdo con lo planteado por la Fiscalía, que había considerado que la joven estaba capacitada para solicitar la eutanasia. Según el informe de los profesionales, la joven sufría una lesión medular derivada de un intento de autolisis, lo cual le causaba un sufrimiento físico y psíquico constante, pero no afectaba su capacidad para tomar decisiones. En su sentencia, la jueza destacó que, aunque la joven presenta síntomas depresivos crónicos y ansiedad, estos no comprometen su capacidad para comprender la situación ni para tomar una decisión informada y razonada.

La jueza, tras examinar el caso en detalle, señaló que no se había demostrado que la joven tuviera capacidades cognitivas alteradas, lo que le permitió concluir que la joven mantenía la capacidad para solicitar la ayuda para morir. Además, indicó que no había evidencia de intento suicida o de una distorsión en su percepción de la realidad, desestimando así los argumentos del padre y sus defensores.

El fallo también dejó claro que el afecto del padre hacia su hija no es suficiente para legitimar su intervención en este proceso, y que las decisiones en materia de eutanasia deben estar basadas en la autonomía de la persona afectada, quien ya era mayor de edad y había cumplido con los requisitos legales para solicitar la muerte digna, según lo estipulado en la Ley Orgánica 3/2021 de Regulación de la Eutanasia.

Este caso, que ha suscitado una gran controversia, no es definitivo, ya que la sentencia aún puede ser apelada ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya. De hecho, los representantes de la Fundación de Abogados Cristianos han anunciado que recurrirán la decisión, abriendo la puerta a una continuación del proceso judicial.