El “síndrome de la Vuelta a Casa”

La vuelta a casa por Navidad es para millones de personas en España un ritual ineludible del calendario anual. Es además un tiempo idealizado de reencuentros, familia y tradición. Tres de cada cuatro españoles tienen previsto volver a casa esta Navidad según el estudio de opinión realizado por la compañía de transporte de viajeros Ouigo para determinar el interés de los viajeros en recibir apoyo psicológico durante los trayectos.

Y es que detrás de esta imagen idealizada y festiva se esconde una compleja realidad emocional que arrastra una carga significativa de estrés, nostalgia y presión. El estudio ha puesto de relieve este fenómeno, conocido como el “Síndrome de la Vuelta a Casa por Navidad”, una realidad que ya afecta a siete de cada diez españoles. Son personas que sienten la necesidad de prepararse mentalmente antes de emprender el regreso a casa. Alegría, estrés y nostalgia se encuentran entra las principales emociones a manejar en el reencuentro con la familia.

El cuarenta y cuatro por ciento de los viajeros dice experimentar nostalgia, estrés un once y agobio un ocho por ciento

Aunque la Vuelta a casa por Navidad se asocia principalmente con sentimientos positivos (el cincuenta y seis por ciento de los encuestados manifiesta sentir alegría y el cuarenta y seis ilusión) existe otra cara de la moneda, la que dice que el cuarenta y cuatro por ciento de los viajeros dice experimentar nostalgia, una emoción que coexiste con el estrés, once por ciento, y el agobio, ocho. Este agobio muestra, además, una tendencia al alza a medida que aumenta la edad de los encuestados.

Un complejo cruce de sentimientos que lleva a que la celebración de la Navidad se vida en una dualidad constante. Mientras el cuarenta y seis por ciento de los encuestados la percibe como una época para disfrutar, el veinticinco la siente realmente como un período de cansancio.

El detalle

La tensión emocional se incrementa en los mayores de treinta y seis años, que sienten más cansancio y estrés al compartir espacios familiares, siendo la franja de cuarenta y uno a cincuenta la que más agradece volver a la rutina.

“Más una obligación que una ilusión”

Para el ocho por ciento de los españoles, la vuelta a casa por Navidad es más “una obligación que una ilusión”. El impacto emocional es de tal calibre que si bien el setenta y cuatro por ciento desea regresar por Navidad, al finalizar el periodo festivo, el treinta y siete reconoce que termina las vacaciones cansado y con ganas de regresar a su rutina habitual. Un diecinueve por ciento, incluso, señala que tras estas fechas “necesita vacaciones después de las vacaciones”.

El elemento más desestabilizador según los entrevistados tiene que ver con las ausencias o pérdidas de seres queridos

El estrés asociado a la vuelta a casa por Navidad se explica fundamentalmente por una combinación de factores emocionales, económicos y de organización. El elemento más desestabilizador según los entrevistados tiene que ver con las ausencias o pérdidas de seres queridos. Este elemento de estrés ha sido señalado por el treinta y nueve por ciento de los viajeros. Le sigue de cerca la gestión económica y logística del viaje, que preocupa al treinta y siete por ciento. Finalmente, la falta de descanso, asociada a la pérdida de rutinas y a los planes obligatorios, estresa al veinticuatro por ciento de los que han participado en el estudio.