Portugal prohibe el burka en espacios públicos

Multa hasta 4.000 euros

La prohibición no se aplica a casos "debidamente justificados" por motivos de salud, laborales, artísticos o de entretenimiento, ni tampoco en lugares como aviones, instalaciones diplomáticas y en lugares de culto o sagrados

Una estudiante ataviada con 'niqab', velo islámico que cubre todo el cuerpo y solo deja un espacio para los ojos, sale de clase en la Facultad de Medicina de El Cairo. (Foto: José Rodríguez Guzmán)
Una estudiante ataviada con 'niqab', velo islámico que cubre todo el cuerpo y solo deja un espacio para los ojos, sale de clase en la Facultad de Medicina de El Cairo. (Foto: José Rodríguez Guzmán)

Portugal ha aprobado este viernes la iniciativa del partido ultraderechista Chega de prohibir en espacios públicos aquellas "ropas destinadas a tapar el rostro", como pueden ser el burka o el niqab islámicos, alegando motivos de seguridad y la defensa de los derechos de las mujeres. Las sanciones por infringir la norma oscilan entre los 200 y los 4.000 euros.

La propuesta de la formación que lidera André Ventura en el Parlamento luso ha contado con el visto bueno del resto de partidos de la derecha del arco parlamentario, incluido el Partido Social Demócrata (PSD) del primer ministro, Luís Montenegro, aunque ha matizado que el texto "puede y debe ser perfeccionado" y así se hará durante el trámite normativo.

"Quien llegue a Portugal, venga de donde venga, con las costumbres y religión que tenga, tiene que cumplir, respetar y hacer respetar las costumbres y los valores de ese país", ha defendido Ventura la norma, que ya ha sido aprobada con particularidades en lugares como Francia, Dinamarca y Bélgica.

Enfrente se ha encontrado con el voto en contra de las fuerzas de la izquierda, que han acusado a la ultraderecha "de querer dirigir el odio hacia estas comunidades". "Lo que de verdad mueve a Chega es poner a unos contra otros, alimentar la desconfianza y el miedo hacia el diferente. Las mujeres musulmanas son ahora el objetivo para proseguir su discurso racista y xenófobo", ha lamentado la diputada comunista Paula Costa.

La prohibición no se aplica en aquellos casos "debidamente justificados" por motivos de salud, laborales, artísticos o de entretenimiento, ni tampoco en lugares como aviones, instalaciones diplomáticas y en lugares de culto o sagrados.

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