Manolo Tourón y Angel Huete, dos singulares periodistas ourensanos

Publicado: 04 mar 2025 - 01:20

El periodista ourensano Manolo Tourón recibiendo una placa.
El periodista ourensano Manolo Tourón recibiendo una placa. | La Región

De vez en cuando en estas páginas hemos recordado a los entrañables compañeros que hacían este periódico en otras épocas. Sobre ellos han escrito Maribel y Chico Outeiriño y yo mismo, que los traté mucho tanto en mi etapa en la radio en Ourense, como luego, siendo corresponsal de La Región en Vigo. Pero hay dos colegas singulares que hoy quiero traer aquí, ambos ourensanos, y que son especialmente recordados en Vigo: Uno es Angel Huete y otro Manolo Tourón, si bien sólo el primero perteneció a la plantilla de este periódico.

Quienes los conocimos y admiramos tuvimos en ellos un ejemplo de calidad humana y sentido profesional, en aquellos tiempos en que el espacio natural de trabajo del periodista era la calle y no estar sentado delante de un ordenador. Si bien Huete fue conocidísimo en Ourense, no tanto se puede decir de Tourón. Este último era ouresano de cuna, pero pronto emprendió el vuelo hacia otros lares. Fue uno de los grandes cronistas deportivos del periodismo gallego de los años sesenta y setenta.

Fue alumno de la Escuela oficial de periodismo de Madrid, donde obtuvo el ansiado carné. Empezó su vida laboral en “Marca”, y como escribiera de él José Francisco Armesto “conoció a la gente de aquella casa, la mayor parte muy joven, de los que salieron muy pronto los santones de la prensa deportiva y fue allí en donde quedó convencido que lo suyo era el seguimiento de cuanto deporte se practicaba en el mundo”. Volvió a Vigo para formar parte de la redacción de “El Pueblo Gallego”, periódico de bien diferente historia, incautado y adscrito a la llamada “Prensa del Movimiento”. Pero pronto destacó y fue fichado por “Faro de Vigo”, donde desarrollaría el resto de su vida laboral. Fue uno de los elementos esenciales de la etapa de expansión del decano de la prensa española, donde se mostró polivalente. Al aparecer “Faro Deportivo”, fue director de facto, aunque en la cabecera aparecieran de modo Alejandro Armesto, primero, y Alvaro Cunqueiro, después.

Tenía un sentido especial para dar forma a la noticia y un modo de escribir pulido y sencillo al tiempo

Era Tourón viajero incasable y estuvo presente en los grandes acontecimientos deportivos de su tiempo: Juegos Olímpicos, Juegos del Mediterráneos o Mundiales de Fútbol. Estuvo presente en la Vuelta Ciclista a Francia con mucha frecuencia y en la ronda española. Sus contactos en el mundo deportivo eran muy notables. Contaba Armesto que, de vez en cuando levantaba el teléfono para hablar con Elola, Samaranch o Gich, que fueron los responsables del deporte español, y estaba claro que mantenía con todos ellos una relación muy fluida. Pero nunca sorprendió tanto a sus compañeros de redacción cuando recibió una llamada desde México. Lo llamaba personalmente el mismísimo Mario Moreno “Cantinflas”. En la tarde del 23-F de 1981 yo estaba con él en la redacción de “Faro de Vigo”, y al advertir la preocupación que a todos nos causaba la noticia, comentó irónicamente, “aquí huele a mierda”. Ya fallecido, y siendo yo presidente de la Asociación de la Prensa de Vigo, le hicimos un homenaje en la persona de su esposa e hija, también periodista.

En cuanto a Angel Huete, tan recordado aquí como en Vigo, nadie lo ha descrito mejor que el radiofonista y periodista ouresano de Cudeiro, Gerardo Rodríguez. En Vigo se sigue recordando su nombre por su bonhomía y singular estilo de hacer periodismo, del que quedó huella en todos los medios en los que trabajó desde “Diario de Pontevedra” a “La Región” y “Faro de Vigo”. Tenía un sentido especial para dar forma a la noticia y un modo de escribir pulido y sencillo al tiempo. Era valiente y decidido en un contexto donde había que tener cuidado con los delegados de Información y turismo y los gobernadores civiles, especialmente con estos últimos que te podían mandar a la cárcel directamente.

En “Faro de “Vigo” se contaba con humor el sofoco que sufrió su dueña doña Josefina Amado de Lema cuando se enteró de que se había incorporado a su plantilla Huete, que pasaba por ser un republicano. Entre sus cualidades destaca una infrecuente y que no se practica en nuestros días: era un buen redactor y revisor de los textos de otros en orden a mejorar los propios escritos, cosa que sugería con especial atención. Lo hacía con tal estilo y elegancia para que el corregido no se sintiera preterido o molesto. Al contrario. En su etapa ourensana, Huete desplegaba toda su capacidad polifacética. Escribía textos publicitarios y dirigía Publicidad Central y colaboraba en Radio Ourense confeccionando guiones para programas comerciales. Su expediente como periodista en los archivos de la Asociación de la Prensa de Vigo, de la que fue miembro destacado, los deposité yo mismo, con el resto de los históricos, en el Archivo Histórico de la Diputación de Pontevedra, a disposición de los investigadores.

Contenido patrocinado

stats