Opinión

La familia tradicional

La "familia tradicional" es un concepto extraño (por decirlo humorísticamente), muy empleado por políticos conservadores y colectivos religiosos o pseudoreligiosos. Un concepto que esgrimen como si significara algo. Y no significa nada. No existe una "familia tradicional". No se sabe qué es eso. 

Una familia tradicional es por ejemplo la de un padre viudo con su hijo ¿o no? O una viuda con su hija y un sobrinito. O unos padrinos que tuvieron que hacerse cargo de unos críos porque sus progenitores fallecieron. O un padre o una madre solteros o con un niño adoptado. O una pareja de mujeres con un niño. 

Una familia tradicional es la de un hombre, una mujer, dos, tres o unos parientes, vecinos o lo que sean, que cuidan a un niño o niña y lo educan hasta que se hace adulto. Eso es una familia tradicional. Y hay muchas distintas.

Ese absurdo concepto de familia tradicional implica según sus encendidos defensores que un niño tiene que tener necesariamente un papá y una mamá en exclusiva y si no, la familia no vale porque no es lo bastante tradicional. ¡Vaya, qué gracia! Pensemos un poco, pero en serio.

La mayoría de los niños del mundo se crían sin papá en África, en Sudamérica, en Extremo Oriente, aquí. Por suerte. Porque su papá está demasiado ocupado matando tutsis en Ruanda, pegando tiros en las FARC o cargándose infieles en la Yihad, y solo aparece por casa una vez cada equis meses para hacerle otro niño a su señora. Después se va. Y es mejor que sea así, porque ese papá no es ningún ejemplo decente para el niño. Al niño lo crían su madre, su abuela, sus tías, primas y las vecinas del barrio. Casi no hay hombres por allí. ¿Por qué un niño tiene que tener por narices un papá y una mamá? No siempre es así. Además ¿y si el papá y la mamá son imbéciles, entonces qué?

Yo he tenido un papá y una mamá buenísimos, maravillosos, pero ese no es el destino que les toca a todos. Y un niño sin papá o mamá, o con dos o con uno o cuatro es igual de bueno que yo. O puede que mejor. El asunto papá/mamá no tiene nada que ver con el resultado. Ni con el niño.

No se crean esos discursos falsos. Discrepen. Piensen. Las familias no las hacen papá y mamá solitos. Las hacen el tío Jorge, el primo Jaime, la abuela Margarita, Manolo el vecino, Kung Chuang el de la tienda de abajo, doña Lucía la portera, Diego mi amiguito del cole que tiene dos papás, doña Carmen la maestra, Kevin el novio nuevo de mamá, Daniel el que trae la compra del súper y Claudio el del bar. Esa es también la familia tradicional. ¿O no nos hemos enterado aun? Pues ya es hora de que hinquemos los codos people, aunque solo sea... por el bien de los niños.

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