El Pazo libra su primera batalla

PRIMER PARTIDO DE LOCAL

El COB recibe al Palmer balear en su estreno como local, buscando que su evolución le permita sumar su primer triunfo en la competición liguera

El cobista Kingsley Okanu lanza a canasta durante un entrenamiento en el Pazo.
El cobista Kingsley Okanu lanza a canasta durante un entrenamiento en el Pazo. | La Región

La guerra de la Primera FEB se compone, esta temporada, de 32 batallas y un par de descansos. El COB dejó escapar la primera en Alicante tras un gran inicio y un flojo final. Ahora librará la siguiente en casa, ante su gente. El Pazo sube el telón oficial para recibir al Palmer, un recién ascendido con peligro que también hincó la rodilla en su estreno. Los ourensanos quieren que la mejoría y la química de las piezas nuevas se note cada semana que pasa. Esta tarde tienen una oportunidad para evolucionar desde las victorias, que siempre allana el proceso.

El COB tendrá que coger lo bueno de la primera jornada y darle continuidad. Especialmente en una parcela ofensiva que, por momentos, se atasca. Conseguir esa fluidez se antoja clave ante un adversario que aprieta y muerde en defensa. Porque atrás el equipo ourensano tiene ese potencial para dominar el rebote y cerrar las vías de acceso de los interiores de un Palmer que también tiene tiradores y Feliu fue el ejemplo en su primer día. Orejas tiesas, ya se ha encargado Moncho López de advertir a los suyos durante la semana de trabajo.

Unos entrenamientos de no estuvieron exentos de sustos en el apartado físico. Hasta última hora serán duda dos jugadores cobistas que pueden dejar sin tantas alternativas al preparador cobista, que tendrá que poner en práctica el poder del colectivo.

No estarán entre los 12, pero sí serán muy importantes los aficionados. Quitando amistosos de pretemporada, llega el momento de la verdad para un público que tiene ganas de lío tras un verano de expectativas.

Peligro

Enfrente estará un equipo que no quiere estar de comparsa en la categoría tras su histórico ascenso la pasada campaña. Una mezcla de continuidad con fichajes que oscilan entre los conocedores de la liga y las apuestas arriesgadas buscando el mirlo blanco. Al Palencia lo tuvieron contra las cuerdas entrado el último cuarto, pero a los de Marco Justo se les fue la luz en el momento de la verdad. Un entrenador que es clave en una idea de juego agresiva, valiente y que no quiere pagar la novatada durante mucho más tiempo. Frierson, Hollowell y Feliu por fuera, y los centímetros de N’Guessan y Dike en las trincheras, son la tarjeta de presentación, con sus luces y sus sombras.

Son los ingredientes de un partido importante. A estas alturas de la película calificarlo de clave parece un sacrilegio, pero sí importante. El COB quiere equilibrar su casillero de triunfos y derrotas y comenzar a hacer del Pazo el fortín que se desea y necesita en una competición llena de amenazas. Vuelve el baloncesto oficial al parquet del Paco Paz, el que cuenta, el de las alegrías y las penas. Y lo hace con un duelo en el que no se puede fallar. El COB es consciente de ello.

Moncho López: “Tenemos que estar seguros y listos para luchar”

Moncho López, entrenador del COB, analizó el estreno en casa de los suyos y destacó que “veo al equipo con ganas de jugar su primer partido en el Pazo, de dar una buena imagen. Esperemos que nio nos traicionen los nervios y tengamos una buena puesta en escena. Que estemos seguros de lo que estamos haciendo y preparados para luchar. Nuestro público quiere ver a un equipo aguerrido y trabajador y, luego, desear que nos salgan las cosas bien. Y cuidado, que este partido es muy difícil”.

Para el preparador ferrolano, el Palmer “es un rival muy bien trabajado. Me gusta mucho la filosofía de Marco Justo. Un equipo muy agresivo en defensa, que pueden presionar a todo el campo, y que en ataque tiene muchas opciones, con un juego construido entorno a varios registros. Tiene bases muy fuertes en el uno contra uno, muy buenos en el pick and roll y muy buenos tiradores como Frierson o Feliu. Nos van a exigir mucho trabajo defensivo y comunicación constante. Sería un error pensar que, porque sea un recién ascendido, nos va a resultar fácil”, apuntó.

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