Pablo Otero: “Buscamos la interacción”

Tras permanecer cerrado durante 13 años, el Mercado Ponte Canedo abrió sus piertas en Ourense con un nuevo concepto que fusiona la tradición del mercado de abastos con la gastronomía contemporánea y la oferta cultural. Situado en un edificio de piedra de principios del siglo XX, a escasos metros del Puente Romano y de la estación del AVE, el inmueble ha sido completamente rehabilitado respetando su fachada original, combinando la piedra y la madera con un interior moderno.

Impulsado por la empresa O Formiguillo y el chef Pablo Otero, el renovado mercado cuenta con ocho puestos que ofrecen desde frutería, panadería y pastelería, hasta pescadería, carnicería, charcutería, vinoteca y una pulpería donde se puede degustar el pulpo a feira, a la gallega o a la brasa. Además, dispone una amplia zona de restauración con elaboración de platos tradicionales y vanguardistas, utilizando los puestos del mercado como una gran despensa para el chef.

Entre los puestos de mercado en Ourense se encuentra la cafetería que dispone de una gran variedad de tapas elaboradas, diferentes cada día de la semana. En esta zona de restauración integramos dos zonas diferenciadas, una con mesas altas y de pared en todos los laterales del local, y otra con mesas bajas en un montaje en línea tipo “feira”, para que el visitante pueda degustar los productos del mercado en un ambiente típico gallego.

Propuesta

Pablo Otero comenta que “nuestra idea ha sido y es combinar la tradición con una propuesta que sea atractiva para los visitantes. El visitante puede venir a comprar productos o adquirir comida preparada para llevar o la puede consumir en el local. Buscamos esa interacción con el visitante”.

El mercado abre todos los días desde las siete de la mañana, cerrando a las diez de la noche entre semana y ampliando horario hasta la medianoche los fines de semana y vísperas de festivo. La cocina se mantiene operativa hasta las 23,00 horas y, los fines de semana, hasta la una de la madrugada. El chef hace balance de estos casi 10 meses desde la apertura y destaca que “la respuesta de la gente ha sido muy buena. Hemos tenido momentos muy fuertes en Navidad, durante el Entroido. Ahora tenemos terraza y eso aumenta la oferta en el exterior. Hay momentos de mucha actividad con otra de menos pero es normal porque estamos desde primera hora de la mañana hasta la noche y hay momento para todo. Por ejemplo, la cafetería funciona muy bien desde primera hora y ahora, con la terraza exterior, también por las noches”.

Actividades

Además de su vertiente gastronómica, el Ponte Canedo busca consolidarse como espacio cultural con actividades como catas de vino, ferias de artesanía y antigüedades, o el tradicional Cocido de Entroido. Desde enero de este año, ha recuperado la histórica Feira do 21, de carácter mensual, así como un nuevo mercadillo de anticuarios que se celebra cada tercer sábado de mes. Esta es, precisamente, otra de las cualidades que Pablo Otero destaca en el Mercado Ponte Canedo: “Tratamos de que haya actividades tanto para los niños como para la gente mayor, creando sinergias con el barrio. Tenemos en mente hacer talleres, torneos de ajedrez, etcétera”.

El Mercado Ponte Canedo se perfila así como un punto de encuentro tanto para el público local como para visitantes, uniendo la tradición comercial de Ourense con las tendencias de ocio y gastronomía más actuales.