Dos realidades para la mitad del mundo

Las últimas noticias de organismos internacionales revelan dos caras de la situación de las mujeres en el mundo: una dolorosa y otra esperanzadora. Por un lado, persiste la violencia contra la mujer: en muchos lugares, cada diez minutos muere una mujer o niña a manos de alguien de su entorno familiar, lo que demuestra que aún en 2025 la violencia de género continúa siendo una crisis urgente que agrede a la dignidad y al derecho a la vida de millones.

Por otro lado, la otra cara de la moneda es que las mujeres también están transformando su realidad mediante el emprendimiento. Cada vez más mujeres en el Sur Global se lanzan a crear negocios, asumir liderazgo, innovar y contribuir al desarrollo económico y social. Este impulso es una prueba de que -cuando se les dan oportunidades, recursos y apoyo- las mujeres son un motor de cambio y esperanza.

Estas dos realidades conviven, a veces con crudeza: violencia y miedo, por un lado; valentía, autonomía y futuro por otro. Apoyar el emprendimiento femenino tiene que ir acompañado -indeclinablemente- de políticas serias de protección, igualdad real, justicia efectiva y una cultura que reivindique la dignidad de la mujer.

Porque no basta con que algunas logren salir adelante: todas deben poder vivir sin miedo, decidir sobre su vida y desarrollar su proyecto personal y profesional. Que la esperanza que representa el emprendimiento no sea un oasis para pocas, sino un horizonte para todas.

Pedro Marín Usón (Zaragoza)