Nuevas sanciones de Europa a petroleras y flota fantasma rusa

Los europeos mantienen su apuesta por la asfixia económica de Rusia mientras dure la invasión de Ucrania, de modo que hoy se han aprobado nuevas sanciones contra petroleras y buques de la denominada flota fantasma, aquella que estaría ayudando a los soviéticos a sortear las restricciones a la exportación de energía rusa.

En concreto, la UE ha añadido 41 nuevos buques a su lista negra, en la que se encuentran 597 embarcaciones. Estos navíos, muchos de ellos petroleros, están sujetos tanto a la prohibición de acceso a puertos como a la prohibición de prestación de una amplia gama de servicios relacionados con el transporte marítimo. De este modo, se incrementan de forma efectiva los costes que asume Rusia, se interrumpen sus operaciones marítimas y se detienen sus relaciones con operadores de la UE.

En total, desde el inicio de la guerra, el bloque comunitario ha aplicado medidas punitivas contra 2.600 personas y entidades, entre las que se incluyen empresarios vinculados con las petroleras estatales rusas, Rosneft y Lukoil.

Por su parte, el gobierno de Reino Unido ha incluido también en su lista de sanciones a varias empresas energéticas rusas, entre ellas las petroleras Tatneft, Russneft y NNK-Oil, por su implicación en la "desestabilización de Ucrania" y por haber obtenido beneficios del gobierno de Rusia durante la invasión del país vecino.

Así, las sancionadas son 19 empresas, entre ellas las emiratíes Redwood Global Supply y Tejarinaft, así como otras de Uzbekistán y Kirguistán; y cinco personas, procedentes de Azerbaiyán, Pakistán y Uzbekistán. Las sanciones incluyen la congelación de activos y otras restricciones financieras y de inversión.

Este tipo de medidas contra el entramado empresarial ruso sospechoso de beneficiarse de la guerra se ha activado contra unas 24.000 entidades y personas. Entre las afectadas están las dos principales petroleras rusas, Rosneft y Lukoil, que exportan hasta 3,1 millones de barriles de crudo al día.

Estados Unidos también ha tomado acciones decisivas en este ámbito, con sanciones a las principales petroleras rusas.