El nieto de Mario

Mario Varela parece enfadado a raíz de la pregunta de su nieto: “¿y la bis (su bisabuela recientemente fallecida) cómo subió al Cielo?”. Su enfado parece provenir de que, en su opinión,” se da por hecho con mucha frivolidad el futuro post morten del ser humano”. Entiendo que se está refiriendo a lo que la doctrina cristina afirma de la vida eterna después de la muerte.

Mario habla con el corazón y comprendo su reacción ante la ingenuidad del niño. Pero lo que los cristianos sabemos sobre los novísimos (lo que sucede a la persona después de la muerte) es fruto de la labor teológica y científica de siglos y generaciones de las mejores inteligencias de la Humanidad. Y, sobre todo, lo sabemos porque nos lo dice (en presente, pues está vivo) el propio Jesucristo: “Y sobre la resurrección de los muertos, ¿no habéis leído lo que os dejó dicho Dios: Yo soy el Dios de Abraham y el Dios de Isaac y el Dios de Jacob? No es Dios de muertos sino de vivos” (Mateo 22, 32).

Mario ya sabía todo esto, pero se le ha olvidado. Somos débiles, no somos perfectos, pero nuestro padre Dios si lo es y tenemos la seguridad que guarda eternamente felices a nuestros seres queridos esperándonos.

Rafael Saiz Alonso

(Ourense)